La entidad, pionera en la búsqueda de soluciones innovadoras y personalizadas, desarrolla la firma manuscrita digital como una de las acciones que forman parte del plan de transformación hacia una Oficina Digital, que permitirá suprimir barreras formales basadas en documentación papel.
Mediante dispositivos de captura de firmas (tablets), se recogen los rasgos biométricos del firmante a partir de variables de presión, rapidez e inclinación de los trazos, que permiten identificar y autenticar a la persona firmante, aportando total seguridad jurídica y garantizando la autenticidad de la firma. Con esta nueva herramienta, integrada en la historia clínica electrónica, se consigue un archivo digital y automático del documento.
La implantación del sistema de firma digitalizada biométrica permitirá a Mutua Universal mejorar la gestión interna y agilizar trámites administrativos con los mutualistas y asociados. En la actualidad se pueden firmar más de 20 tipologías de documentos, con un volumen diario de 7.000 procesos de firma, y con la previsión de incorporar nuevos documentos susceptibles de firma biométrica.
Por otro lado, avanzar hacia la Oficina Digital significa minimizar el consumo de papel, favoreciendo así la sostenibilidad del medio ambiente.