Asepeyo, en su apuesta por las nuevas tecnologías, decidió implantar en el año 2003 la primera Unidad de Valoración Funcional, que se basa en el uso de la biomecánica para el estudio y la evaluación de las lesiones de los pacientes.
Siete años después, cuenta ya con cinco Unidades, siendo la mutua pionera en la implantación de este tipo de estudios médicos evaluadores. Una de las cinco unidades, situada en Canarias, será presentada el próximo jueves 11 de noviembre en un taller práctico que tendrá lugar en el Colegio Oficial de Médicos de Las Palmas. La sesión contará con la participación de organismos y entidades como el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, el Instituto Nacional de la Seguridad Social o el Instituto de Biomecánica de Valencia, quienes expondrán también la labor que llevan a cabo en su trabajo diario y la utilidad que pueden aportar este tipo de estudios.
La biomecánica, que es una disciplina científica que utiliza los conocimientos de la mecánica, la ingeniería, la anatomía, la fisiología y otras disciplinas para el estudio del comportamiento del cuerpo humano, se utiliza en este caso como herramienta para evaluar de forma objetiva el grado de afectación funcional de un paciente tras una lesión y su capacitación laboral para reincorporarse a su puesto de trabajo en el momento apropiado. Asepeyo, desde enero de este año, ha realizado en sus cinco Unidades de Valoración Funcional un total de 3.373 pruebas a 1.470 pacientes.
La valoración funcional permite detectar, entre otras cosas, la pérdida de fuerza y movilidad en las articulaciones o las disfuncionalidades de la columna cervical, dorsal y lumbar, así como realizar estudios de valoración de equilibrio y marcha. Es a partir de aquí cuando se puede modificar la planificación inicial del tratamiento a seguir. Asimismo se puede utilizar para obtener datos sobre la evolución del paciente y para realizar las valoraciones prequirúrgicas o posquirúrgicas oportunas.