Ello tendria una repercusion muy importante puesto que, tal como obliga la ley, trasladaria a las mutuas la prestacion de servicios que ahora soporta el SES, segun indica.
En este sentido, considera «imperdonable» que las mutuas tengan superavit mientras el sistema publico ve reducir su presupuesto y atiende a pacientes que tendrian que ser atendidos por ellas.
06-06-2012 / 16:20 h EFE
Comisiones Obreras ha propuesto al Gobierno, como fórmula para incrementar los ingresos, nuevos impuestos sobre las energías renovables, la eliminación de todas las bonificaciones en el tramo autonómico del IRPF y llegar al máximo en el cobro del céntimo sanitario.
Estas medidas forman parte del plan que el sindicato ha presentado al presidente del Gobierno extremeño, José Antonio Monago, para reducir el déficit público y evitaría una limitación de los derechos de los empleados públicos, según ha informado hoy en un comunicado remitido a Efe.
Es su alternativa al Plan de Ajuste que el Consejo de Gobierno aprobará mañana en una sesión extraordinaria en forma de dos proyectos de ley, que CCOO rechaza por los recortes que plantean, especialmente en sanidad y educación públicas.
Las propuestas del sindicato incluyen medidas tanto en el capítulo de ingresos, "donde hay márgenes para recaudar más sin afectar a los más débiles", y en el de gastos, "donde se prima la reorganización y eficiencia de los recursos disponibles".
En el primer caso, plantea la introducción de nuevos impuestos propios relacionados con las energías renovables, específicamente en los sectores de energía fotovoltaica, termosolar e hidráulica.
También sugiere la eliminación de todas las bonificaciones en el tramo autonómico del IRPF y de los impuestos de transmisiones y sucesiones, de tal forma que sólo se mantengan las mismas que operan con carácter estatal.
Un incremento sobre el impuesto sobre las bebidas alcohólicas, excluyendo el vino por el interés económico de este producto para la región, es otra de sus medidas.
Todas estas cuestiones suponen una cuantía que podría rondar los 20 millones de euros.
CCOO propone además llegar al máximo en el tope de cobro del céntimo sanitario, que aún tiene margen de subida en Extremadura, como ya se ha hecho en la mayor parte de las comunidades, y con lo que estima se podría recaudar casi 6 millones de euros.
Para la reducción de gastos, el sindicato estaría dispuesto a estudiar la disminución de la productividad variable por objetivos en el Servicio Extremeño de Salud (SES), con lo que se podría conseguir un ahorro de unos millones de euros, según sus datos.
Apuesta también por la eliminación de la llamada productividad fija B, que en este momento cobran los médicos que compatibilizan su actividad en los centros públicos con la medicina privada, y que está por encima de los 4 millones de euros.
La organización aconseja además mejorar, "de una manera muy significativa", la gestión de cobros a terceros y ampliar "de una manera considerable" el catálogo de enfermedades profesionales.
Ello tendría una repercusión muy importante puesto que, tal como obliga la ley, trasladaría a las mutuas la prestación de servicios que ahora soporta el SES, según indica.
En este sentido, considera "imperdonable" que las mutuas tengan superávit mientras el sistema público ve reducir su presupuesto y atiende a pacientes que tendrían que ser atendidos por ellas.
Por otra parte, el sindicato vuelve a rechazar los planteamientos que hace el Gobierno con respecto al absentismo laboral de los empleados públicos, porque recorta el derecho retributivo a las personas enfermas y porque podría contribuir a la extensión de infecciones en centros de trabajo, según advierte.
Asimismo, el sindicato ha presentado medidas de racionalización del gasto que tienen que ver con la reorganización de la administración, la gestión de compras, la reversión de servicios externalizados para evitar duplicidades o la potenciación de la atención primaria de salud para ahorrar en el gasto hospitalario.
Estas medidas, junto a otras de reducción de órganos directivos y personal eventual mediante la profesionalización de determinados puestos de gestión y la centralización de la gestión de las áreas sanitarias, podrían suponer una rebaja del gasto que superaría los 50 millones de euros, según CCOO.