El miedo a perder el empleo o sufrir algún tipo de represalia laboral o de una no renovación del contrato por no poder acudir al trabajo por estar enfermo ha cambiado la mentalidad de los trabajadores en estos tiempos de recesión y feroz desempleo que cada vez son más reacios a acudir al médico a pedir un parte de baja.
Un estudio del servicio de inspección de la Conselleria de Sanidad al que ha tenido acceso este periódico ha puesto de manifiesto que en el primer trimestre de este año se ha registrado una importante caída de la tasa de absentismo respecto al mismo periodo del año anterior.
En el grupo de población general de la Comunidad Valenciana, esta tasa se ha reducido de enero a junio de 2011 un 11,9%, de modo que los once millones de jornadas laborales que se perdieron en el primer semestre del año anterior se han reducido a 9.800.000 días no trabajados este año. Total, de un ejercicio a otro y solo en un semestre se han ganado más de un millón de jornadas trabajadas.
Estos datos son la prueba irrefutable del palpable temor a quedarse sin trabajo, de modo que salvo que sea estrictamente necesario los ciudadanos con empleo acuden a trabajar aunque tengan fiebre o algún tipo de dolor.
La Conselleria de Sanidad ha examinado también qué ocurría con la tasa de absentismo entre sus trabajadores y los datos de los programas de inspección realizados no han podido ser más esperanzadores, ya que durante el primer semestre de este año los empleados de la Agencia Valenciana de Salud han perdido 75.000 jornadas menos que en el mismo periodo del año anterior.
De modo que de enero a junio de 2010 se contabilizaron 650.000 días trabajados perdidos y un año después la cifra se ha reducido a 575.000 días, lo que supone una disminución del 10,97%.
Ganar 75.000 jornadas de trabajo se ha traducido en unos beneficios de 5 millones de euros para la Administración sanitaria, según indicaron fuentes de todo crédito, que apuntaron que el dinero ahorrado corresponde a las sustituciones que se ahorran para cubrir las vacantes.
Servicios en Sanidad
El factor de mayor peso en el cambio de la tasa de absentismo entre la población general ha sido, sin lugar a dudas, el temor a perder el puesto de trabajo pero en el caso de los empleados de la sanidad pública esa mejora de resultados obedece a la incorporación de nuevos programas que se traducen en fomentar la colaboración con el médico para ayudar al paciente a que se incorpore a su puesto de trabajo lo antes posible.
La decisión de la Conselleria de Sanidad de trasladar el servicio de inspección a cada uno de los 22 departamentos ha logrado una mayor proximidad con los usuarios, ya que en vez de aplicar políticas generalistas se ha podido estudiar el proceso de cada enfermo para analizar lo que le ocurre, tener contacto con él, orientarle y facilitarle las herramientas más eficaces para ayudarle en su recuperación.
Mayor presión pero más justificación a la hora de pedir bajas
Desde el sindicato CC OO ven con preocupación el descenso en el número de bajas laborales, al interpretarlo como un síntoma de "la presión" que muchos trabajadores sufren. Según el portavoz de la organización en Alicante, Salvador Roig, "el trabajador intenta estar más tiempo en la empresa", incluso "para hacerse notar de que está". Esto favorece, asegura, que se pidan menos bajas por miedo a represalias. "Sólo lo hacen cuando es cuestión de máxima urgencia". No obstante, matiza que esto también evita la picaresca con este tema y permite un uso más racional de las bajas.
En esa línea, el secretario general de la Federación de Servicios Públicos de UGT en l’Alacantí, Eduardo Pin, destaca que los funcionarios del Servicio de Inspección Médica realizan su trabajo "con más medios", y que, en el caso concreto del empleado público, ésa es la razón principal de la bajada del absentismo. Así, recuerda que ha sido más elevado cuando la interinidad en la función pública era también mayor. El responsable recalca también el "compromiso" de UGT en la eliminación del absentismo, entendido como "el abuso de los periodos de incapacidad temporal por enfermedad", y que supone un fraude. A. T.