Desde el año 2011, el que las Mutuas se hicieron cargo de esta ayuda, han abonado 23.621 prestaciones, con un gasto total de 687,94 millones de euros La edad máxima de concesión de esta prestación ha pasado recientemente de los 18 a los 23 años
Un total de 3.627 familias con niños enfermos de cáncer u otras enfermedades graves han sido beneficiarias de prestaciones económicas para poder cuidar a sus hijos durante 2021. Desde la creación de esta ayuda las Mutuas colaboradoras con la Seguridad Social, que son asociaciones privadas de Empresas, han concedido 23.621 prestaciones.
El coste de las prestaciones abonadas en 2021 creció un 7,64% respecto al ejercicio anterior, alcanzando los 145,86 millones de euros. En total, las Mutuas han destinado 687,94 millones de euros al reconocimiento de este tipo de prestación desde que en 2011 se hicieran cargo de ella. Con este subsidio las Mutuas compensan la pérdida de ingresos que sufren los padres al reducir su jornada laboral para atender a un hijo menor afectado por cáncer o por alguna de las enfermedades graves reconocidas en la normativa.
La Ley de Presupuestos Generales de 2022 modificó recientemente el artículo 7 del Real Decreto 1148/2011, de 29 de julio, que desarrolla esta prestación. Así, en lo referente a la edad del menor como criterio de extinción del subsidio, ésta ha pasado de los 18 a los 23 años. Desde la entrada en vigor de esta nueva norma las Mutuas han atendido 25 casos que cumplían este criterio. La Seguridad Social, con la que las Mutuas colaboran como asociaciones privadas de Empresarios, entre otras, con esta prestación, se encuentra ultimando una corrección normativa ante la situación transitoria existente, que ayudará a aclarar algunos aspectos muy concretos que han provocado cierta confusión en la tramitación de estas ayudas.
No obstante, el Sector de Mutuas cree que sería importante considerar la conveniencia de que esta prestación, al tener todas las características propias de los servicios sociales y dependencia, fuera financiada con cargo a imposición general en lugar de con cargo a cotizaciones por Contingencias Profesionales, que pagan exclusivamente las empresas, de modo que se produzca una efectiva separación de las fuentes de financiación de las prestaciones en la Seguridad Social con cargo a cotizaciones.
La duración media mantiene la tendencia creciente desde la creación de esta prestación. En 2021 este incremento se ha acelerado, aumentando un 33,3% respecto al ejercicio anterior. Esta prestación ha triplicado su duración media desde su creación en el año 2011.